Esta mañana ha venido mi jefe a la oficina con gorro muy mono, uno con piel de bisonte y unos cuernos, dice que es como el de Jamiroquai (a mi jefe le gusta la música clásica) y lo lleva porque hace mucho frío pero entre los del trabajo se rumorea que se lo ha puesto porque creemos que ha pasado las navidades en Turquía y todavía no le han terminado los implantes capilares. Le hemos preguntado por el gorro y donde lo había comprado y nos dice que es de unos amigos suyos del otro lado del charco, yo ya no sé que pensar.
Y de lo que tampoco sé que pensar es del Euribor que ayer marcó un mínimo histórico y no hay quien lo entienda ¿Qué habrá hecho hoy?
El indicador más utilizado en las hipotecas de España repite valor en su tasa diaria con lo que mantiene el mínimo histórico del -0.509% dejando así la media mensual de Enero en el -0.507% (otro mínimo histórico) frente al -0.253% de hace un año, esto quiere decir que aquellos a los que les toque revisión este mes experimentarán una reducción en su cuota de unos 5€ por cada 50.000€ que tengan hipotecados.
El euríbor entró en terreno negativo por primera vez en su historia hace casi cinco años, en febrero de 2016, y desde entonces no ha levantado cabeza hundiéndose desde este verano cuando ha acumulado cinco mínimos históricos consecutivos, en agosto (-0,35%), septiembre (-0,41%), octubre (-0,46%), noviembre (-0,48%) y el último en diciembre (-0,49%). No obstante es probable que haya tocado fondo y si no ocurre nada extraordinario lo veremos todo este año en el entorno del -0.5% al -0.4%.
El Banco Central Europeo (BCE) sigue sin intención de subir los tipos de interés, más bien lo contrario aunque la pandemia por un lado y la efectividad de la vacuna por otro podrían echar por tierra cualquier tipo de previsión, lo más lógico sería que el BCE retirase sus estímulos poco a poco en el segundo semestre de 2021 y a partir de ahí ver subir ligeramente al Euribor.