Bolsa Blog de bolsa
Tanto la tasa de participación y la tasa de desempleo son económicos métricas utilizadas para medir la salud del mercado de trabajo. La diferencia clave entre los dos indicadores es que la tasa de actividad mide el porcentaje de la población que están en la fuerza laboral, mientras que las tasa de desempleo mide el porcentaje dentro de la población activa que se encuentra actualmente sin trabajo.
Un ciudadano se clasifica como un miembro de la fuerza de trabajo si tiene un trabajo o bien está buscando activamente un trabajo. Por contra, la tasa de participación es el porcentaje de los adultos que son miembros de la fuerza de trabajo.
En Estados Unidos deberían estar felices porque su tasa de desempleo actual se encuentra en el 4,40%, niveles que fueron vistos por última vez en el año 2007. En comparativa, la Unión Europea acumula un desempleo actual del 8%.
No obstante, para el pueblo americano la verdadera preocupación ha sido en este siglo XXI ladisminución constante de la tasa de actividad. Mientras que en 2000, fue 67%; en la actualidad ha caído hasta el 63%. Este factor es uno de los más importantes para explicar el ascenso del movimiento proteccionista que lideró la candidatura del republicano Donald Trump y le llevó a la Casa Blanca.
Muchos economistas sostienen la disminución mano de obra es el resultado de que aquellos trabajadores poco calificados pierden sus puestos de trabajo debido a la externalización o la automatización, y al no tener éxito la búsqueda de un nuevo empleo y abandonan la fuerza de trabajo en su totalidad.
Por esta razón, se tiende a sentir que la tasa de participación es una medida más exacta de la situación del mercado de trabajo que la tasa de desempleo, que sólo tiene en cuenta la mano de obra. Una tasa de desempleo del 5% significa que sólo 5 de cada 100 trabajadores en la fuerza laboral tienen puestos de trabajo, pero no tiene en cuenta a los trabajadores parados que han dejado de buscar por completo, a pesar de que desean conseguir un trabajo.
