Artículos de opinion
Hace unos meses pude leer una reconstrucción de que hace el ordenador de un coche, y en qué momentos, cada cosa que sucede durante un accidente.
- 0 milisegundos – Un objeto choca con la puerta del coche
- 1 ms – Los sensores detectan una onda de presión
- 2 ms – El sensor de aceleración del coche detecta el choque
- 2,5 ms – El sensor central detecta las vibraciones
- 5 ms – El ordenador del vehículo comprueba que no se trate de un evento insignificante, como por ejemplo un golpe de un carrito del supermercado o un pequeño incidente. Sigue calculando la gravedad del choque. La estructura de la puerta ya está absorbiendo energía
- 7 ms – El ordenador confirma la gravedad de la colisión y calcula las acciones a realizar
- 8 ms – Se lanza la orden de apertura al airbag lateral
- 8,5 ms – Se abre el airbag lateral.
- 15 ms – Se rellena el airbag
- 17 ms – El airbag cubre al ocupante y lo aleja de la zona de impacto
- 27 ms – La velocidad del impacto se ha reducido de 50 a 23 Km/h, otro sistema aleja la pelvis del ocupante de la zona de impacto. El Airbag comienza a desinflarse de forma controlada.
- 30 ms – El ocupante experimenta una fuerza por un breve instsante de unos 12G
- 45 ms – El ocupante y el airbag se mueven con la estructura mientras se deforma
- 50 ms – El ordenador desbloquea las puertas
- 70 ms – El airbag se termina de desinflar. Los ingenieros consideran que en este momento, la colisión «se ha completado»
- 150-300 ms – El ocupante se da cuenta de la colisión.
Como véis, muchas cosas pasan hasta que nos damos cuenta de que nos hemos metido una leche.
Últimamente, uno de los mayores generadores de noticias del mercado ha sido el programa de inversión de alta frecuencia de Goldman Sachs (aquél que robaron). El sistema automático, extremadamente complejo, utiliza datos obtenidos de los mercados del NASDAQ y el NYSE para invertir anticipadamente en prácticamente todas operaciones que ocurren en la bolsa. Todo en cuestión de milisegundos y sin que la mayoría del mercado se de cuenta.
El “front running” que es como se llama, es la inversión anticipada en valores por parte de un broker para su beneficio propio, se puede comparar con el típico sistema de “infla y tira”, ya sabes, infla la expectativas sobre un valor y en cuanto suba, tirar de beneficios. Lo bueno es que aquí no tienes que inflar las expectativas, solo tirar de beneficios. Lo que hacía el programa de inversión de Goldman Sachs era examinar cada operación que se daba en el mercado de valores y después, en cuestión de milisegundos, compraba o vendía antes de que la primera posición llegara al mercado. Así, la plataforma automática podía rascar cada día millones o incluso miles de millones del mercado, sin aportar nada de valor al mercado en sí.
Actualmente 3 compañías, que engloban el 66% de todo el volumen de valores en EEUU se han vendido a sus mayores clientes ofreciendo datos de valor incalculable a un alto precio. A cambio de unos cuantos millones de dólares, tú también podrías ver qué órdenes se van a procesar en breve, pudiendo así comprar antes y vender justo a tiempo. El sistema es fraudulento por naturaleza, ya que permite el acceso a datos muy valiosos a cambio de un breve pago a la bolsa.
NYSE Euronext sugiere que hasta el 42% del volumen diario de la bolsa existe gracias a las órdenes rápidas, aquellas que están cometiendo “front running”. El dato es interesante cuanto menos, ya que prácticamente todas las inversiones de la bolsa se satisfacen con un volumen similar de alguien quien, en realidad, está estafándolas. Al conducir volúmenes tan grandes, las inversiones rápidas permiten que los creadores del mercado, como Goldman Sachs, arranquen unos cuantos céntimos de cada transacción, creando beneficios de millones de dólares todos los días y sin riesgo alguno.
¿Qué va a pasar ahora?
Ha habido muchas peticiones para que el SEC regule la nueva industria de inversiones rápidas, y ya se está llevando a cabo una pequeña investigación. Por el bien de los inversores, tanto grandes como pequeños, esperamos que este tipo de inversiones se ilegalice, y que las compañías que la han usado sean llevadas a juicio. El proceso es un auténtico delito, y sólo espero que aquellos que hayan usado el sistema sean puestos en su sitio.
Una cosa es el libre mercado y otra el libre mercado en el que unos pocos juegan con ventajas, claro que en esas condiciones ni es libre mercado ni es nada. Afortunadamente lo que de momento sí es libre es la información y poco a poco vamos descubriendo los sistemas que utilizan algunos para enriquecerse a nuestra costa.