Recientemente publicaron en Xataka Ciencia un artículo titulado “El experimento del chocolate o el poder irracional de lo gratuito“, os pego un resumen
En un experimento llevado a cabo por Dan Ariely y presentado en su libro Las trampas del deseo, se vendieron dos tipos de chocolate a diversos grupos de estudiantes escogidos al azar: las exclusivas trufas de Lindt de Suiza y los más corrientes bombones Hershey Kisses.
Las trufas Lindt costaban 15 céntimos (aproximadamente la mitad de su precio al por mayor). Los bombones Hershey, a 1 céntimo. Como era de esperar, los participantes escogieron los Lindt: son de mejor calidad y eran baratísimos. Concretamente, el 73 % escogió las trufas.
Pero todo cambió en cuanto bajaron de precio 1 céntimo a los dos chocolates y por tanto, los bombones Hershey se vendieron a cero céntimos, es decir, completamente gratis. Entonces, el 69 % de los estudiantes escogieron los más corrientes Hershey sencillamente porque eran gratis. Lo cual no tenía una explicación racional, pues el precio de los Lindt continuaba siendo de 14 céntimos de diferencia de los Hershey: en este segundo experimento se había reducido su precio de los 15 a los 14 céntimos
Como veis, solemos realizar un comportamiento racional hasta que ciertos “activadores” llegan y quizás uno de los más fuertes es el de la palabra “GRATIS” que como bien demuestra este artículo, nos vuelve irracional.
Las acciones macroeconómicas (ya sean monetarias, fiscales o reguladoras) tienen como objetivo influir en la conducta, por ejemplo las políticas monetarias cambian los tipos de interés con el fin de influir en la decisión de la población sobre el ahorro o gasto del dinero y los estímulos fiscales incrementan la demanda agregada al darle a la gente más ingresos a corto plazo para que gasten.