Resumen del día

por Carlos Lopez

Recordando artículos:

Noticias del día:

La imagen del día:

Publicidad viejuna: Enseñando a los españoles a usar un cajero automático

ATM1

La encuesta del día:

[poll id=”778″]

El comentario del día:

Hoy no tiene mucho de economía pero viene bien para desengrasar:

# 9Anónimo
5 de marzo de 2013, a las 7:55

Muy tempranito, un invernal día de hace más de cinco siglos, había una buena liada en los campos de Toro, en Zamora. Se produjo una de esas batallas épicas que para los más fervorosos supuso el primer paso para la formación de la gran nación española. Si se mira sin pasión, aquella refriega solo fue lo que eran todas, una bronca más entre reyes por lograr más territorio, más súbditos y más poder. España les traía al pairo. El 1 de marzo de 1476 se produjo la famosa batalla de Toro, la que ganó Fernando el Católico, porque si llega a ganar su enemigo, a estas alturas, en lugar de copla cantaríamos fado.

Cuando Enrique IV reinaba en Castilla, la heredera era su hija Juana la Beltraneja. Como unos decían que la niña no era suya, que su mujer se la había pegado, que no era legítima, después de muchos dimes y diretes el rey acabó tragando con quitarle la corona a su hija para dársela a su hermana Isabel. Pero con una condición: Enrique IV decidiría con quién se casaría su hermana.

Y en estas Isabel fue y se casó a escondidas con Fernando, con lo cual se rompió el pacto y Enrique IV decidió que su hija Juana recuperara su derecho a heredar la corona de Castilla. Como ella sola no podía pegarse con su tía Isabel, se casó con el rey de Portugal, Alfonso V, y así llegamos a la batalla de Toro.

En una parte del campo, las tropas portuguesas. Si ganaban ellas, los destinos de Castilla quedarían unidos a los de Portugal. Y en la otra esquina del ring, Fernando de Aragón, defendiendo los intereses de su señora esposa Isabel de Castilla. Si ganaba él, los portugueses se volverían por donde habían venido, Juana la Beltraneja se quedaría sin corona y Aragón y Castilla formarían el embrión de España.

No se trata de contar a estas alturas quién ganó, pero la guinda heroica a la ofensiva la puso un alférez portugués: una batalla no estaba perdida hasta que se le arrebataba el estandarte al enemigo, y el abanderado portugués no estaba dispuesto a soltarlo. Le cortaron el brazo derecho, pero volvió a levantar el estandarte con el izquierdo. Le cortaron el izquierdo de un espadazo, pero el alférez volvió a cogerlo, esta vez con los dientes. Hasta que debió de llegar un adversario y le dijo: «Anda, déjalo, que te vas a hacer daño…».

2 comentarios

santi27 5 marzo 2013 - 11:38 PM

Quien sabe que hubiera pasado.. quizás la prima de riesgo estaría a 100 o quizás estaría a 800 y en vez de decir “Se lo han llevado crudo” diríamos “têm-lho levado cru”.
De hecho Portugal es independiente a pesar de ser anexionada dinásticamente al reino de España tras perder en la batalla de Alcántara. Pero bueno.. llamar España a lo que había en aquella época es como llamar Neoyorkinos a los indios Lenapes que vivían en la bahía de Manhatan y que la vendieron por 60 florines  a los holandeses, aunque ellos no sabían ni que era un florin ni que coño significaba vender la tierra.
 
 

responder
Juan 6 marzo 2013 - 9:27 AM

Santi27: llamar España a lo que había en 1476 no es comparable a llamar neoyorkinos a los indios Lenapes. Más bien sería comparable a llamar estadounidenses a los habitantes de las Trece Colonias británicas en Norteamérica a finales del siglo XVIII… no es lo mismo.

responder

Deja un comentario