Every breath you take
Every move you make
Every bond you break
Every step you take
I’ll be watching you
Así comienza el mayor éxito de los Police, el Every breath you take que antes se utilizaba tanto en los anuncios. Lo que no sabía Sting cuando la compuso es que la letra era de lo más profética. Cada movimiento que hacemos cada paso que damos e incluso cada latido de nuestro corazón (si tienes un reloj inteligente) está siendo observado por alguien. El Big Data. Esto está bien, porque nos permite tener una experiencia personalizada en nuestro móvil o cuando accedemos a Internet pero también puede ser utilizada para utilizarnos, bien nuestros bolsillo o nuestro voto.
El otro día encontré un interesantísimo artículo sobre como el Big Data ayudó a Trump a ganar las elecciones y os lo resumo a mi manera.
La personalidad de cualquier individuo se compone de cinco rasgos o factores principales: El factor O (Openness o apertura a nuevas experiencias), el factor C (Conscientiousness o responsabilidad), el factor E (Extraversion o extroversión),el factor A (Agreeableness o amabilidad) y el factor N (Neuroticism o inestabilidad emocional), los cinco forman el acrónimo “OCEAN”.
Mediante nuestro comportamiento online nosotros vamos dando datos sobre el tipo de personalidad que tenemos. Por ejemplo, si le damos un like a “Lady Gaga” le estamos dando un like a nuestro factor “Extrovertido” y si le damos un like a alguna página de filosofía nos estamos marcando como “Introvertidos” (le estamos quitando peso a la “E”). Cada pieza es muy pequeña para sacar conclusiones, pero si juntamos cientos podemos crear un perfil muy bueno de cada persona.
Por ejemplo, analizando 68 likes de Facebook el psicólogo Kosinski es capaz de predecir de cualquier usuario el color de la piel (con un 95% de acierto), orientación sexual (88%), y su afiliación política (85%) además de otros muchos datos como por ejemplo si tus padres están divorciados.
Al poco de publicarse este estudio, Facebook dejó de hacer públicos los likes de cada usuario. Pero existen muchas maneras de obtener esta información a través de encuestas, juegos y aplicaciones online. Incluso el sensor de movimiento de tu móvil (o reloj) permite saber si eres una persona inquieta.
En Noviembre de 2015 Nigel Farage contrató los servicios de Cambridge Analytica para ayudarle en su campaña a favor del Brexit, era una nueva empresa de marketing político que basaba su estrategia en el modelo “OCEAN”.
El 18 de Agosto de 2016, Donald Trump escribió un Tuit que decía “Pronto me llamarán MR Brexit“, por entonces el candidato republicano ya había contratado los servicios de Cambridge Analytica.
El éxito de este tipo de marketing se basa en la combinación de tres elementos. El análisis del comportamiento basado en el modelo OCEAN, el análisis del Big Data y la segmentación publicitaria. En primer lugar, se compran datos personales de diferentes fuentes, como registros de la propiedad, ventas de automóviles, datos de compras, tarjetas de bonificación, afiliación a clubs, suscripciones de revistas, etc. En Estados Unidos casi todos los datos personales están a la venta (y en España vamos por ese camino). Por ejemplo, si quieres puedes comprar un listado de dónde viven las mujeres judías incluyendo su número de teléfono. Se agregan estos datos con las listas electorales del Partido Republicano, datos online públicos y se calcula el perfil de personalidad de cada individuo. Estas huellas digitales de repente se convierten en personas reales con miedos, necesidades, intereses y direcciones postales.
Cada mensaje de Trump se basaba en el análisis de datos. En el día del tercer debate presidencial entre Trump y Clinton, el equipo de Trump probó 175.000 variaciones de anuncios en Facebook para encontrar el argumento perfecto. Los mensajes variaban en detalles microscópicos con el fin de orientar a los destinatarios de la mejor manera psicológica: diferentes títulos, colores, leyendas, con una foto o un video. Por ejemplo, para los habitantes del distrito “Litlle Haiti” en Miami se les ofrecía un mensaje en el que se criticaba la actuación de la fundación Clinton en el terremoto de Haiti. Las personas que hacían campaña electoral puerta a puerta a favor de Trump recibieron una aplicación con la que podían identificar las opiniones políticas y los tipos de personalidad de los habitantes de cada casa. Exactamente el mismo programa que usaron los activistas del Brexit.
No sabemos el peso que ha tenido el Big Data en la victoria del Brexit y de Trump pero lo que si nos muestra la experiencia es que los que la utilizan bien obtienen mejores resultados. Tanto para venderte un voto, como una moto.