La sorprendente lista de las ciudades más caras del mundo para vivir

Esta semana se ha dado a conocer el listado de las ciudades más caras del mundo para los trabajadores extranjeros y si bien los datos son en general previsibles si que llama la atención quien figura en el número uno, Ashgabat, una ciudad con  aproximadamente un millón de habitantes que es la capital de Turkmenistan

Si bien, el año pasado también lideró este ranking, en el año 2018 ocupara el puesto 111  lo que significa que subió 110 puestos en un solo año. La ciudad es famosa por su llamativa y costosa arquitectura, ostentando el récord mundial de mayor densidad de edificios de mármol blanco, con más de 500 en total. La capital se conoce a menudo como “la ciudad de los muertos”, debido a que muchas de sus calles suelen estar desprovistas de residentes, y es extremadamente difícil para los visitantes obtener un visado para visitar el país, que está dirigido por un régimen represivo.

El meteórico ascenso de Ashgabat a la cima de la clasificación se debe en gran medida a los problemas económicos del gobierno de Turkmenistán, según la CEPA. La nación centroasiática, rica en energía, se ha enfrentado a una grave inflación y un mercado negro de divisas ha provocado el aumento del coste de las importaciones. Ambos factores han provocado un gran aumento de los costes que pagan los visitantes en Ashgabat.

Aunque Ashgabat puede ser la ciudad más cara para los extranjeros, la historia es diferente para los residentes permanentes. Dado que la encuesta del TCE se centra en el coste de la vida para los expatriados, excluye los gastos de manutención, como las tasas de los servicios públicos, los precios de los alquileres, la compra de coches y las tasas escolares, todos los cuales suelen ser cubiertos por las empresas mediante una asignación.

La mayoría de las ciudades entre las primeras diez de la lista son centros económicos donde el crecimiento ha llevado a un aumento en el precio de la vivienda y otros costos de vida.

Pero Ashgabat debe su posición a los problemas económicos más que a la prosperidad, lo que la convierte en un caso atípico.

Algo similar ha ocurrido con el Líbano que ha pasado del puesto 45  al tercero en un año, debido a una serie de factores, incluida la agitación política de los últimos años y la depresión económica grave y extensa derivada de la pandemia y de la explosión de su puerto.

En general las ciudades europeas están en la mitad del ranking, con París en el 33, Roma en el 47, Madrid en el 67 y Barcelona en el 84.

Este es el listado completo

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