Para nosotros, simples mortales que de toda la vida sabemos que las cosas se compran con dinero y si no lo tienes lo pides prestado, el oir hablar del mercado de futuros y derivados, coberturas de riesgo, Warrants y demás instrumentos financieros nos suena sin duda a algo muy profesional que lo utiliza gente engominada y con tirantes. Quizas esa misma gente ha querido complicar voluntariamente este mundo financiero para crear una barrera de entrada y proteger su status y puestos de trabajo. Pero en el fondo, si uno es lo suficientemente curioso y coge una calculadora sencilla (nada de calculadoras financieras u hojas de cálculo), se da cuenta de que ciertos productos financieros con nombres rimbombantes nos permiten sacar mayores rendimientos a nuestros ahorros que los tradicionales fondos.
Tal es el caso de los futuros, utilizados desde hace cientos de años por los granjeros para proteger sus cosechas, el trato es sencillo, yo te compro ahora a un precio fijo la cosecha del año que viene, con lo cual tu te garantizas el salario llueva o no. Con los años este concepto ha evolucionado mucho y se ha llevado al mercado bursatil, de tal manera que uno puede vender acciones que no tiene. Así lo pudimos ver en los atentados del 11-S ya que Al-Qaeda vendió previamente acciones de aerolíneas (o petroleo), para comprarlas más baratas después de dicha fecha (con lo cual se queda de beneficio la diferencia entre la venta y la compra).
Este rollo viene a colación del último artículo de cotizalia titulado Los nuevos ‘futuros sobre viviendas’ vaticinan la mayor depreciación en la Historia de EEUU, como veis, hemos pasado de futuros sobre zumo de naranja, a futuros de acciones y a futuros sobre viviendas. Aquí sacamos dos conclusiones, la primera es que en EEUU andan bastante preocupados por el tema inmobiliario y la segunda, es que incluso en época de bajadas de precios de un activo, cualquiera puede forrarse (de hecho, las bajadas suelen producirse más rápido que la subidas). Por otro lado, si miramos aquí, Trichet admite similitudes pero marca distancia entre el mercado inmobiliario en Europa y en EEUU.
Si optamos por invertir en fondos americanos, nos encontramos con el problema de que los posibles beneficios se nos van con la constante bajada del dólar, no obstante siempre podemos Cubrir el riesgo de cambio como nos cuentan en Cinco Días.
Pero seamos realistas, estamos hablando productos para gente que tiene ahorros y como nos cuentan en El Mundo, aquí estamos Endeudados a golpe de crédito.
La deuda por créditos al consumo, entre los que destacan tarjetas de crédito y créditos rápidos, ya representa el 27% del pasivo total de los hogares, según cifras del Banco de España. El dinero concedido de esta forma se elevó un 17% entre 2006 y 2007 hasta los 93.000 millones de euros. Una escalada motivada por el encarecimiento de las hipotecas, que obliga a los consumidores a financiar cada vez más sus compras
Ya veis lo peligroso que se pone el asunto, tiro de tarjeta de crédito porque no puedo pagar la hipoteca. Y yo me pregunto ¿no sería más fácil no gastar tanto? ¿cuántos de vuestros gastos son prescindibles?
Actualización: Interesante Comparador de Fondos de Inversion