En el artículo “Todo lo que debemos saber acerca del PER” comentamos el concepto PER (Price to Earnings Ratio) siendo una ratio que relaciona la capitalización bursátil de una empresa con sus beneficios actuales. Con este cálculo obtendremos los años que necesitamos para recuperar nuestra inversión.
El cálculo del PER es el siguiente:
PER = Capitalización bursátil del valor / Beneficio Neto
PER = Cotización de las acciones / Beneficio por Acción (BPA)
En el artículo de hoy veremos desde el punto de vista del inversor. cuáles son las mejores oportunidades que ofrece el mercado para entrar y mantener a partir del siguiente cuadro comparativo que relaciona los rendimientos de precio del S&P 500 anualizados promediados.
El secreto del largo plazo
Como podemos ver en la tabla los mejores momentos para entrar en bolsa y mantener en el largo plazo se dan cuando la relación precio – beneficios es baja, cuanto más baja más valor obtendremos por nuestra inversión. Por ejemplo, el promedio de rentabilidad a 5 años superior al 10% únicamente se da en situaciones que el PER del S&P500 se encuentre por debajo de 10. Con un PER < 8 obtenemos una rentabilidad promediada a cinco años del 10,2% y con un PER situado entre 10 – 12 veces la rentabilidad alcanza el 12%. Si nos vamos aún a un plazo mayor promediado, diez años, observamos como únicamente aquellos que hayan entrado en el S&P 500 con un PER inferior a 8 veces obtendrán una rentabilidad promediada del 10%, en concreto del 11,1%. Estas relaciones se dan en un escenario muy específico, cuándo el mercado se encuentra por los suelos después de sufrir un auténtico batacazo en sus cotizaciones. En ese momento el sentimiento de la masa es puro pánico y prácticamente no quieren saber nada de la bolsa, por lo que infravaloran desorbitadamente los beneficios futuros que puede llevar la inversión. Es en esos precisos instantes que aquel inversor que no se deje llevar por la percepción generalizada, podrá encontrar su oportunidad de entrada y mantener. Estas relaciones tan bajas de PER las se dieron en el fondo de las crisis de 1973, 1982, 1992, 2002 y 2009.