Al que fuera dirigente de la Unión Soviética, Leónidas Breznev, le hicieron una vez una entrevista en la que le pedían respuestas breves. El entrevistador le preguntó: “¿Cuál es la situación económica de este país?”. A lo que Breznev respondió con un lacónico: “good”. Ante lo conciso de la respuesta, el periodista le pidió una descripción de la situación en dos palabras, entonces Breznev replicó: “not good”. Y tan a gusto que se quedó, lo contrario le pasó al mercado el viernes pasado: el dato del paro en los EUA fue bad pero al rato decidió que era “not bad”. Y también se quedó a gusto, eso sí, ambos descolocaron a los espectadores. ¿Por qué la tasa de paro más alta en 26 años en la primera economía del mundo no es una mala noticia? Porque estos datos tan psicológicos consiguen lo que el mercado quiere, que la Administración Obama no retire ninguna subvención al consumo y que la FED siga inyectando dinero barato. Y eso es lo que quiere la bolsa, ¿Qué la economía va mal? Por supuesto, pero con medicina de liquidez -y como hemos visto en los últimos meses- las empresas van aumentando su capitalización aunque cada vez tengan menos empleados y posibles consumidores de sus productos. Si a alguien le queda alguna duda de la desconexión economía real/bolsa, tenemos el mejor ejemplo en Rusia, su bolsa ha subido este año más del 125% (http://www.droblo.es/un-repaso-a-la-rentabilidad-de-las-bolsas-de-todo-el-mundo/ ) y su PIB ha caído casi el 9%.
Y efectivamente, a las pocas horas de conocerse la cifra de paro, Obama promulga ley para ayuda a desempleados y compra de vivienda, el G-20 se compromete a continuar con los “programas de estímulo” y el Dow Jones marca nuevo máximo anual. Y a mitad de semana la UE concede prórrogas a varios países para mantener déficits públicos elevados: España y Francia hasta 2013, Irlanda hasta 2014 y Reino Unido ampliable a 2015, ¿Casa eso con la idea de “retirar estímulos” a corto plazo? Por supuesto que no. Algo curioso es que los mercados entienden que más dinero público en los EUA es más inyección de $ al mundo, con lo que se produce un debilitamiento de la divisa y con ello una subida de las materias primas –que se cotizan en $- y eso ayuda a las acciones relacionadas con sectores relacionados (desde mineras a petroleras) a continuar la escalada. Es decir, algo negativo como que el dinero cada vez tenga menos valor se toma como algo positivo. Mientras las divisiones de banca de inversión (eufemismo de trading) -también de los bancos europeos- deslumbran por sus beneficios como esta semana han anunciado Barclays y HSBC. Pero supongamos que es cierta la bolsa acierta como factor predictivo y nos encontramos en unos meses con una economía recuperándose, el miedo es que el crudo, el cobre, el café etc. estarán muchísimo más caros y la demanda de una sociedad que ha ampliado su capacidad de ahorro dispare los precios, ¿Es posible que ello provoque una hiperinflación? Sí, pero no es lo que descuenta el mercado.
Últimamente todo el que abre la boca para predecir algo se equivoca y yo no soy la excepción por eso considero más fiables los datos que las opiniones. Y a alguien que apoya su apuesta con dinero que quien no lo hace. Y resulta que hay datos de un mercado organizado poco conocido en España pero que sirve para medir exactamente la expectativa de inflación: me refiero a los bonos indexados a la inflación. Aunque suena muy complicado no lo es tanto: Si alguien quiere comprar una deuda pública emitida por Alemania a 10 años y la rentabilidad es del 5%, Alemania pagará eso, por eso se denomina renta fija. Pero si compras a Alemania una deuda a 10 años indexada a la inflación la rentabilidad será menor pero Alemania te garantizará pagarte en intereses la inflación que haya habido ese año…es decir, si compras el bono indexado al 3%, no ganarás el 5% de los bonos normales pero te aseguras que ese será tu beneficio por encima del coste de la vida. Si la inflación resulta ser de media en esos diez años menor del 2% la operación te habrá salido poco rentable pero si es superior, como Alemania te va a pagar en intereses lo que suban los precios, conseguirás mucho más del 5%.
Una vez vista la teoría, es fácil deducir que si los bonos indexados a la inflación están 2% por debajo de la renta fija es porque el mercado cree que de media la inflación en los próximos diez años en Alemania será esa. Veamos pues rentabilidades reales de esta semana y así podremos comprobar las expectativas de inflación reales que tiene el sector financiero, que además apoya con mucho dinero esa previsión: por ejemplo en Alemania la renta fija a 10 años está en torno al 3.30% y al mismo periodo protegidos contra la inflación al 1.40%, luego la previsión de inflación para los próximos 10 años en Alemania está en el entorno del 1.9% (http://www.droblo.es/diferencial-bono-a-10-anos-aleman/ ). Aún redondeando al alza, un 2% de inflación, que es el objetivo teórico de BCE, los próximos diez años es un escenario asumible que descartaría las profecías hiperinflacionistas y que debería tranquilizar bastante –si aciertan- a los hipotecados españoles pues no debería suponer un Euribor muy diferente al que ha existido en los últimos años, excluyendo las exageraciones extremas de 2008 y 2009. Por desgracia, supone también una recuperación económica anormalmente lenta, incluso en Alemania, que en teoría será la economía europea que antes crezca.
Cambiando de tema, hace ahora 6 meses salieron en los EUA unos muy discutidos “stress test” (http://www.euribor.com.es/2009/05/08/la-semana-en-los-mercados-7/ ) que pretendían exigir a la gran banca que dispusiera de la suficiente liquidez en caso de un empeoramiento económico, en el peor de los casos se hablaba de una tasa de paro en 2009 del 8.9%…y ya está en el 10.2%. Con la subida bursátil y la política de “demasiado grandes para caer” dichos bancos no tendrán problema de momento pero no deja de ser preocupante que en 6 meses se estén superando los peores pronósticos de la FED de largo y contraproducente con el movimiento bursátil de estos meses. Y es que las contradicciones se suceden, incluso en las expectativas, por un lado se publica que los inversores esperan que la crisis sea larga pero por otro se siguen descontando situaciones inverosímiles como que El mercado sube un 21% la previsión de dividendo de la banca para 2010, analistas como Albert Edwards (de SocGen) prevé nuevos mínimos para las bolsas en 2010 mientras Juan Carlos Costa ve el Ibex en 14 mil en mes y medio si se consigue romper la resistencia 12 mil. ¿Con qué quedarse? A mi los dos comentarios que más me han llamado la atención esta semana son estos: