Cuando haces una entrevista de trabajo, es el entrevistador quien más preguntas suele hacer. Quiere conocerte y saber cuáles son tus capacidades para ver si eres la persona idónea para el puesto. Pero no se trata de que sólo quien te entrevista haga preguntas. Posiblemente te preguntará si tú tienes alguna duda, si quieres aclarar algo.
Es tu momento, no te quedes callado, ni digas que tienes todo claro. Pregunta.
En Forbes.com publican algunas preguntas que puedes hacer:
¿Qué es para esta empresa un candidato ideal? Si sabes qué aptitudes y actitudes está buscando la empresa, será más fácil encajar tu perfil.
¿Cuáles son los problemas a los que soléis enfrentaros? ¿Cómo puedo ayudar? Demuestras que estás pensando en global y en ayudar al equipo.
¿Qué es lo que más valoran de esta empresa las personas que trabajan aquí? Te va a dar una visión de cómo tus.futuros compañeros ven a la compañía.
¿Quieres saber algo más sobre mi? Es una pregunta valiente. Pero a la vez demuestra que confías en ti mismo y que no tienes nada que ocultar.
¿Hay programas de formación? Egoistamente, la formación es algo muy valioso y mejor si lo facilita la empresa, pero a la vez estás demostrando que estás interesado en ampliar conocimientos, que no te quieres quedar obsoleto.
¿Con quién trabajaría? Con cuántas personas, qué relación vas a tener con ellos…
¿Qué planes de crecimiento tiene la empresa? Saber si quieren lanzar nuevos productos, servicios…, podrás hacerte una idea de hacia dónde va la compañía.
¿Por qué está el puesto vacante? Te permitirá saber si la persona fue despedida, si se jubiló, si ascendió, si se fue a otra empresa…
¿Cuál es el siguiente paso en el proceso de selección? Demuestra que estás interesado en la oferta e invita al seleccionador a que te diga cuántas personas más están en el proceso.
¿Qué otras preguntas crees que deberían hacerse?
