Los pros y contras de las hipotecas online

Los pros y contras de las hipotecas online

El número de ventas de vivienda está siendo históricamente bajo, y la concesión de hipotecas camina por supuesto en paralelo, lo cual obviamente no augura buenos resultados a esos datos.

Una parte muy importante de toda esta cuestión tiene que ver sin duda con el endurecimiento de las hipotecas, un endurecimiento que ya hemos reflejado en este mismo espacio, y que sin duda no contribuye a animar al comprador. Y un endurecimiento que además acentúa cuestiones como la elección del modelo de hipoteca, ya que, tenemos la tendencia inicial a pensar que la hipoteca de contratación online puede resultar la más beneficiosa, y sin embargo esto no tiene por qué resultar siempre así.

La hipoteca online, que puedes encontrar en buscadores como kelisto.es presenta dos elementos de atracción innegables; de media siempre viene a resultar más barata que la hipoteca de contratación presencial, y además, elimina o reduce cuestiones como las comisiones y gastos y el grado de vinculación. Éstas son sin duda las principales bases de las hipotecas online, pero, no pensemos que no vamos encontrar cuestiones no tan positivas; de hecho en contra de este modelo de contratación (comparativamente a la contratación de hipotecas presenciales) debiéramos citar sin duda una tendencia muy importante la limitación de edad, también a la limitación de plazos de amortización y por supuesto limitación a los máximos a financiar en la adquisición de una vivienda, elementos éstos que juntos y en unión otras cuestiones tal vez no tan relevantes, puedan hacer no tan atractiva esta propuesta.

En el lado de la hipoteca tradicional, como las que ofrecen el Santander o el BBVAlas ventajas tienen más que ver con el propio modelo de relación con la entidad financiera, es decir, la posibilidad de obtener bonificaciones interesantes a través tanto de la vinculación con otros productos, como, con la adquisición de la vivienda a través de los servicios inmobiliarios de la entidad, una mayor capacidad de negociación persona a persona, y, por supuesto, en líneas generales mayor flexibilidad sobre el producto; en su contra, pues probablemente lo contrario a las virtudes que presenta la hipoteca online.

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