Los mercados están convencidos de que el Banco Central Europeo (BCE) ya no subirá más los tipos de interés, especialmente después de su reunión de octubre, donde pausaron el endurecimiento monetario y expresaron que mantener las tasas actuales ayudaría a reducir la inflación al 2%. La gran interrogante ahora es cuándo empezarán los recortes de tipos.
A pesar de que el BCE no prevé reducciones a corto plazo, los expertos de Pantheon Macroeconomics apuestan por un primer recorte de 25 puntos básicos en marzo, seguido de tres reducciones más en abril, junio y julio.
La clave para que se cumpla esta predicción de Pantheon es que la inflación subyacente no alcance las expectativas del BCE en los próximos seis meses. Pantheon prevé un IPC subyacente promedio del 3,9% en el último trimestre de 2023 y del 2,7% en el primero de 2024, por debajo de las estimaciones del BCE de 4,1% y 3,5% respectivamente. Esto podría llevar a una revisión a la baja de las previsiones del BCE en diciembre y marzo.
Aunque la inflación de servicios sigue alta, los indicadores clave del sector están disminuyendo, lo que podría cambiar el enfoque del BCE. Sin embargo, Christine Lagarde, presidenta del BCE, y otros miembros del Consejo, como Isabel Schnabel, Luis de Guindos y Joachim Nagel, han enfatizado que no se consideran rebajas en los tipos de interés en el corto plazo.
Pantheon Macroeconomics advierte que el crecimiento salarial rígido y el aumento de los costes laborales unitarios son riesgos para sus previsiones de recortes en 2024. Aunque los datos muestran una desaceleración en el crecimiento salarial, todavía hay dudas sobre si esta tendencia es suficientemente rápida como para convencer a los miembros más conservadores del BCE.
Por tanto, si bien hay posibilidades de recortes en las previsiones del BCE, los riesgos apuntan a un inicio más tardío del ciclo de flexibilización monetaria, en consonancia con las expectativas actuales del mercado.