EGIPTO – Noticias (2)

Johngo

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La UE se endurece y exige una transición "ahora"
Podría suspender una ayuda a El Cairo de 680 millones de dólares


PARIS.- La Unión Europea (UE) abandonó la posición moderada y vacilante que mantenía hasta ahora sobre la crisis egipcia y se alineó detrás de Estados Unidos para pedir que la transición democrática en Egipto se inicie "ahora".

En una declaración solemne difundida ayer por los dirigentes de los 27 países presentes en una cumbre en Bruselas, la UE afirmó que el "proceso de transición debe iniciarse ahora" e instó al régimen de Hosni Mubarak a "satisfacer las aspiraciones del pueblo egipcio con reformas políticas y no con represión".

A su llegada a Bruselas, los dirigentes europeos instaron a Mubarak a evitar nuevos episodios de violencia durante la jornada de ayer, llamada "Día de la Partida", convocada por los opositores del presidente egipcio para exigir su dimisión tras 11 días de masivas protestas.

"Esperamos que las fuerzas de seguridad egipcias garanticen las manifestaciones libres y pacíficas", señaló la canciller alemana, Angela Merkel.

Mubarak perderá toda la "credibilidad que le queda a los ojos del mundo occidental" si las manifestaciones se saldan con nuevos actos de violencia, dijo el premier británico, David Cameron.

Los 27 lanzaron además una advertencia al gobierno de El Cairo al dejar planear la posibilidad de una suspensión de la ayuda europea a Egipto, que totaliza unos 500 millones de euros para el período 2011 y 2013.

"La relación entre la UE y Egipto debe regirse por los principios establecidos en el Acuerdo de Asociación", un texto que fija los lazos bilaterales, así como la ayuda para el país árabe, según la declaración. Ese texto llama al respeto de la democracia, la libertad y los derechos humanos.
Críticas internas

No obstante, el tono de la declaración no consiguió satisfacer a todo el mundo en Bruselas. "Muchos jefes de Estado insistieron para que la declaración sobre Egipto fuera más dura. Pero no todos iban en la misma dirección", opinó una fuente diplomática española.

Acusados de haber tardado demasiado en reaccionar y de haber defendido durante mucho tiempo a dictadores y autócratas en los países del sur del Mediterráneo, los europeos levantaron el tono contra El Cairo en las últimas horas, siguiendo el ejemplo de Estados Unidos.

"No podemos correr el riesgo de que se crea que apoyamos a las dictaduras", advirtió desde Munich el ministro de Defensa alemán, Karl-Théodor zu Guttenberg, afirmando no obstante que comprendía muy bien las preocupaciones de los países vecinos en aquella región y "en particular Israel".

Los reproches también se manifiestan en el seno de la UE: "Es increíble que nosotros, el supuesto continente democrático, no hayamos todavía logrado dar nuestro apoyo sin reservas a las masas en la calle", lamentó el ex primer ministro belga, Guy Verhofstadt, actualmente jefe de los liberales en el Parlamento Europeo.

La crisis en Egipto relegó a un segundo plano la agenda oficial de la cumbre prevista desde hace meses. La reunión debía estar consagrada a definir un plan para reducir la dependencia energética de Europa y avanzar en las medidas para reforzar los mecanismos de defensa del euro.

MUBARAK, "UN HOMBRE SABIO"

* PARIS (De nuestra corresponsal).- Silvio Berlusconi, gran amigo del presidente egipcio, se desmarcó de sus pares de la UE y defendió un período de transición "sin rupturas" con Hosni Mubarak. "Occidente, con Estados Unidos a la cabeza, considera [a Mubarak] un hombre sabio y un punto de referencia para todo Medio Oriente", dijo.

Fuente:
La UE se endurece y exige una transición "ahora" - lanacion.com  
 

Johngo

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Hillary Clinton

MUNICH (AFP).- Pese a que apoya la vía democrática, la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, dijo esta mañana que esa opción podría generar riesgos de "caos" con una coyuntura "perfecta" para una "tormenta" y abogó por gobiernos "responsables" en la región.

Durante una conferencia sobre Seguridadm, en Múnich, Clinton se refirió a las rebeliones de los jóvenes en países árabes, especialmente en Túnez y Egipto.

"La región es sacudida por una tormenta perfecta de potentes tendencias", dijo. "Es esto lo que ha empujado a los manifestantes a las calles de Túnez, El Cairo y en ciudades de toda la región. El estatus quo simplemente es insostenible", apuntó.

"Esta generación (de jóvenes) está pidiendo con razón que sus gobiernos sean más eficaces, más responsables y mas transparentes", dijo Clinton.

"Si no hay progresos" en este sentido, "el abismo entre los pueblos y sus gobiernos va a crecer, y la inestabilidad se agravará", añadió, aludiendo a un riesgo de "caos", a una coyuntura "perfecta" para una "tormenta" de disturbios.

"Desde luego, hay riesgos, riesgos ocasionados por esta transición hacia la democracia", subrayó la secretaria de Estado.

"Ello puede engendrar el caos, una inestabilidad a corto plazo, e incluso peor aún (...), y así lo hemos observado en el pasado, la transición puede crear una regresión hacia otro régimen tan autoritario" como el que los ciudadanos quisieron derrocar, agregó Clinton.

Respecto a los acontecimientos en Egipto, Clinton elogió la "moderación" de las fuerzas de seguridad egipcias durante las manifestaciones del viernes contra el régimen del presidente Hosni Mubarak.
 

Johngo

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La economía, paralizada, tardaría en recuperarse

Tarek El-Tablawy
Agencia AP

EL CAIRO.- El malestar en Egipto con el régimen de Hosni Mubarak, que estalló el 25 de enero, ocasionó el cierre de empresas y comercios, de bancos y de la Bolsa, y el éxodo de miles de turistas. La violencia subsiguiente hizo que de la noche a la mañana una nación considerada un pilar de la estabilidad en la región llegara al borde del caos.

Como consecuencia de la crisis política del país, la economía egipcia perdió por lo menos 3100 millones de dólares, según un estudio del banco de inversión Crédit Agricole publicado ayer, a razón de unos 300 millones diarios.

El banco también revisó su pronóstico del crecimiento del PBI egipcio para este año: era del 5,3% y lo bajó al 3,7%. Además, señaló que la libra egipcia podría llegar a depreciarse hasta un 20%. Estas pérdidas son la punta del iceberg de los problemas económicos egipcios.

Cualquier gobierno poscrisis deberá enfrentar desafíos importantes para reconstruir la imagen del país y lidiar con una serie de problemas económicos fundamentales que, con seguridad, serán agravados por la agitación social.

"La economía es el núcleo del problema de Egipto", decía en el informe John Sfakianakis, economista principal del Crédit Agricole.

El PBI de Egipto creció alrededor del 7% durante tres años, antes de que la crisis mundial enfriara la economía y la llevara a tener un respetable índice de 4,7% en 2009. No obstante, Egipto enfrentaba obstáculos importantes que contribuyeron a estimular, si es que no han desencadenado, el levantamiento popular.

Prolifera la pobreza: un 40% de su población de 80 millones de personas vive al nivel o por debajo de la línea de pobreza de 2 dólares diarios. El desempleo oficial ronda el 10%, pero se cree que es más del doble, sobre todo entre los jóvenes. La inflación de los alimentos llega al 17% anual, lo que eleva el costo de vida para millones de personas. Las protestas sólo agravaron esos problemas.

El vital sector del turismo podría "retroceder fácilmente" a los niveles anteriores a 2004, por debajo de los 5600 millones de dólares, dijo Sfakianakis. Como testimonio del impacto en el sector, los funcionarios aeroportuarios de El Cairo dijeron que los únicos extranjeros que llegan allí son periodistas.

Los funcionarios anunciaron una batería de medidas inmediatas destinadas a mitigar las pérdidas, incluido un fondo compensatorio para los comercios destrozados durante las protestas, subsidios de desempleo y la entrega de alimentos.

Mientras tanto, el flamante ministro de Finanzas, Samir Radwan, dijo que los daños sufridos por los comercios y la infraestructura durante los disturbios se estiman en 862 millones de dólares.

El gobierno también se verá obligado a aumentar los gastos para apaciguar a la población, lo que significa que los millonarios subsidios permanecerán intocables.

Refrenar el déficit presupuestario seguramente será apenas una expresión de deseo, ya que los gastos aumentarán vertiginosamente y subirá también el costo de los préstamos para Egipto. También es probable que caiga la inversión extrajera directa, un ingreso clave para el gobierno. Y, aunque es poco probable que los envíos de dinero del exterior se vean afectados significativamente, existe el riesgo a corto plazo de un incremento del flujo de dinero que abandone el país.

Crédit Agricole espera que la deuda pública egipcia en proporción al PBI vuelva a ser del 85% este año y del 97% en 2014, comparada con estimaciones anteriores que calculaban que sería del 70% durante los tres próximos años. El déficit presupuestario podría alcanzar el 12,3% este año, pese a la anterior estimación del 8,2 por ciento.

Traducción de Mirta Rosenberg
 

Johngo

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Túnez, Egipto, Marruecos. Esas “dictaduras amigas”

¿Túnez, una dictadura? ¿Egipto, una dictadura? Al ver cómo los medios de comunicación se regodean ahora con la palabra “dictadura” aplicada al Túnez de Ben Ali y al Egipto de Mubarak, los franceses se han tenido que preguntar si habían leído u oído bien. ¿Acaso no son estos mismos medios de comunicación y estos mismos periodistas los que han estado, durante décadas, martilleándonos con que estos dos “países amigos” eran “Estados moderados”? ¿El despreciable término “dictadura”, en el mundo arabomusulmán, no estaba reservado exclusivamente (tras la eliminación de la “terrible tiranía” de Sadam Hussein en Irak) al régimen iraní? ¿Entonces qué ocurre? ¿Es que hay otras dictaduras en esa región? ¿Nos las habrán escondido los medios de comunicación de nuestra ejemplar democracia?

Sea como fuere, ése es una de las primeras revelaciones que le debemos al sublevado pueblo de Túnez. Su prodigiosa victoria ha liberado a los europeos de la “retórica de hipocresía y de disimulo” en vigor en nuestras cancillerías y en nuestros medios de comunicación. Obligados a desenmascararse, éstos hacen como que descubren lo que nosotros ya sabíamos desde hacía mucho tiempo [1], que las “dictaduras amigas” no son más que regímenes de opresión. Con respecto al tema, los medios de comunicación tan sólo han seguido la “línea oficial”: cerrar los ojos o mirar hacia otro lado, confirmando así la idea de que la prensa tan sólo es libre para con los débiles y los pueblos aislados. ¿Acaso Nicolas Sarkozy no ha tenido el aplomo de afirmar, a propósito del sistema mafioso del clan Ben Ali-Trabelsi, que en Túnez, “había una desesperanza, un sufrimiento, un sentimiento de asfixia de los que, hay que reconocerlo, no habíamos tomado conciencia de su dimensión”?

“No habíamos tomado conciencia de su dimensión”... En 23 años... A pesar de la presencia en el lugar de los servicios diplomáticos más prolíficos comparados con cualquier otro país del mundo... A pesar de la colaboración en todos los ámbitos de la seguridad (policía, gendarmería, inteligencia...). A pesar de las estancias regulares de los responsables políticos y mediáticos que han establecido allí, sin complejos, su lugar de vacaciones [2]... A pesar de la presencia en Francia de dirigentes exiliados de la oposición tunecina, mantenidos al margen, como apestados, por parte de las autoridades francesas y a los que prácticamente se les ha prohibido el acceso, durante décadas, a los grandes medios de comunicación... ¡Cómo ha degenerado la democracia!

En realidad, estos regímenes autoritarios han estado (y continúan estando) bajo la complaciente protección de las democracias europeas en perjuicio de sus propios valores y con el pretexto de que constituían una defensa contra el islamismo radical [3]. Se trata del mismo argumento cínico que, en la época de la Guerra Fría, utilizó Occidente para apoyar a las dictaduras militares en Europa (España, Portugal, Grecia, Turquía) y en América Latina, con la pretensión de impedir de este modo la llegada del comunismo al poder.

Qué formidable lección han dado las sociedades árabes sublevadas a aquellos que, en Europa, no los describían más que en términos maniqueos: es decir, como masas dóciles sometidas a corruptos sátrapas orientales, o como muchedumbres histéricas poseídas por el fanatismo religioso. En cambio, surgen de pronto, en las pantallas de nuestros ordenadores o de nuestros televisores (cf. el admirable trabajo de Al Jazeera), preocupados por el progreso social, en absoluto obsesionados por la cuestión religiosa, ávidos de libertad, hartos de la corrupción, mientras denuncian las desigualdades y reclaman la democracia para todos, sin excepciones.

Lejos de las caricaturas binarias, estos pueblos no constituyen una suerte de “excepción árabe”, sino que se asemejan, en sus aspiraciones políticas, al resto de sociedades urbanas modernas ilustradas. Una tercera parte de los tunecinos y casi una cuarta parte de los egipcios navegan regularmente por Internet. Como afirma Moulay Hicham El Alaoui: “Los nuevos movimientos ya no están marcados por los antiguos antagonismos como el antiimperialismo, el anticolonialismo o el antisecularismo. Las manifestaciones de Túnez y El Cairo están desprovistas de cualquier simbolismo religioso. Es una ruptura generacional que refuta la tesis de la excepcionalidad árabe. Además, son las nuevas tecnologías de comunicación las que alientan estos movimientos. Éstos proponen una nueva versión de la sociedad civil en la que el rechazo al autoritarismo va de la mano del rechazo a la corrupción [4]”.

Gracias sobre todo a las redes sociales digitales, las sociedades, tanto en Túnez como en Egipto, se han movilizado a una gran velocidad y han sido capaces de hacer tambalear el poder en un tiempo récord. Antes incluso de que los movimientos tuvieran ocasión de “madurar” y de favorecer en su seno la emergencia de nuevos dirigentes. Se trata de uno de los pocos casos en los que, sin líder, sin organización dirigente y sin programa, la simple dinámica de la exasperación de las masas ha bastado para hacer triunfar una revolución.

Es un momento frágil y sin duda las potencias ya están trabajando, sobre todo en Egipto, para arreglar la situación de modo que “todo cambie para que no cambie nada”, según el antiguo adagio de Il Gattopardo. Estos pueblos que conquistan sus libertades no deben olvidar el consejo de Balzac: “Se acabará con la prensa como se acaba con un pueblo: concediéndole la libertad [5]”. Las “democracias de vigilancia” tienen infinitamente más habilidad para domesticar, con toda legitimidad, a un pueblo que las antiguas dictaduras. Pero esto no justifica en absoluto su mantenimiento. Ni debe sofocar el fervor de derrocar a una tiranía.

La caída de la dictadura tunecina ha sido tan rápida que los otros pueblos magrebíes y árabes han llegado a la conclusión de que estas autocracias -entre las más antiguas del mundo- se encontraban, en realidad, profundamente carcomidas y no eran más que “tigres de papel”. La tesis se ha demostrado con el caso de Egipto.

Por lo que este impresionante levantamiento de los pueblos árabes hace pensar inevitablemente en la gran proliferación de revoluciones a través de Europa en 1848: en Jordania, Yemen, Argelia, Siria, Arabia Saudí, Sudán y Marruecos.

En este último país, una monarquía absoluta en la que el resultado de las “elecciones” (siempre amañadas) continúa siendo determinado por el soberano, que designa según su criterio a los ministros llamados “de soberanía”, varias decenas de familias cercanas al trono siguen acaparando las principales riquezas [6]. Los cables difundidos por WikiLeaks han revelado que en el país la corrupción alcanza niveles asombrosos de indecencia, más elevados que en el Túnez de Ben Ali, y que las redes mafiosas tenían todas como único origen el Palacio. Un país en el que la práctica de la tortura está generalizada y la censura de la prensa es constante.

Sin embargo, del mismo modo que el Túnez de Ben Ali, esta “dictadura amiga” se beneficia de una enorme indulgencia tanto en nuestros medios de comunicación como entre la mayoría de nuestros responsables políticos [7]. Éstos minimizan los signos que muestran el comienzo de un “contagio” de la revuelta. Ya se han inmolado a lo bonzo cuatro personas. Se han producido varias manifestaciones de solidaridad con las revueltas de Túnez y de Egipto en Tánger, en Fez y en Rabat [8]. Presas del pánico, las autoridades han decidido preventivamente subvencionar los productos de primera necesidad para evitar las “revueltas del pan”. Importantes contingentes de tropas habrían sido retirados del Sahara Occidental y dirigidos a toda prisa hacia Rabat y Casablanca. El rey Mohammed VI y algunos colaboradores se habrían trasladado expresamente a Francia, el fin de semana del 29 de enero, para consultar a expertos en materia de mantenimiento del orden del Ministerio del Interior francés [9].

Aunque las autoridades desmienten estas dos últimas informaciones, es evidente que la sociedad marroquí sigue con exaltación los acontecimientos de Túnez y de Egipto. Dispuesta a unirse al arrebato de fervor revolucionario para deshacerse por fin del yugo feudal, y a pedir cuentas a todos aquellos que, en Europa y durante décadas, fueron cómplices de las “dictaduras amigas”. (Le Monde diplomatique)

MONDIPLO: Le Monde diplomatique - Edición Española
 

Johngo

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Libra egipcia vería nueva prueba en apertura Europa

EL CAIRO (Reuters) - Los bancos de Egipto abrieron el domingo por primera vez en una semana frente a filas de clientes que querían acceder a sus cuentas, pero la libra egipcia tuvo una caída solo modesta luego de que las violentas protestas dieron lugar a conversaciones políticas.

Operadores cambiarios dijeron que podría aumentar la presión el lunes, cuando también abran los bancos fuera de la región.

El país enfrenta otra prueba de confianza el lunes, cuando el banco central subastará títulos del Tesoro de corto plazo por 15.000 millones de libras egipcias (2.600 millones de dólares), tras vese forzado a cancelar licitaciones la semana pasada.

Otras partes de la economía empezaban a normalizarse gradualmente el domingo por primera vez en una semana, con una reactivación de los puertos, la infraestructura de transporte y las fábricas.

Los banqueros estaban preparados para que los inversores extranjeros y los empresarios locales huyeran de la libra el domingo. Pero la moneda cerró a 5,93 por dólar, con un retroceso de 1,3 por ciento desde que se negoció por última vez el 27 de enero.

No obstante, podría seguir cayendo el lunes, cuando abra Europa. "La gente está tratando de salir. Habrá más mañana, cuando vamos a probar 6,0 (libras por dólar)", dijo un operador basado en Londres.

Pero por su parte, Angus Blair, jefe de análisis de Beltone Financial, dijo: "por cómo lucen las cosas, no prevemos una fuga de la libra, de momento. La atmósfera que prevalece es mucho más tranquila de lo que podríamos haber supuesto la semana pasada. Asumíamos alguna dolarización, pero que el sistema soportaría".

"Cada día que pasa hay una mejora gradual de la estabilidad. Si las mejoras continúan así, podría estar cerca de normalizarse para el final de la semana", dijo.

La libra había caído al mínimo en seis años en los dos días de operaciones posteriores a las primeras protestas, del 25 de enero.

El banco central buscó tranquilizar a los inversores en días recientes y su gobernador, Farouk el-Okdah, dio una inusual entrevista de televisión el sábado a la noche, antes de la apertura de los bancos.

"Por supuesto, la próxima semana tendremos algunos problemas pero podremos manejarlos porque tenemos la experiencia del pasado", dijo Okdah.

La bolsa aún no ha abierto.

Mona Mansour, economista de CI Capital, dijo: "para la inversión privada, no creo que los inversores huyan de Egipto".

"Quizá veremos más salidas de fondos de la bolsa y de la renta fija. También podríamos ver mayores rendimientos de los títulos públicos. Esos son los impactos de corto plazo de esta crisis", sostuvo.

El fabricante egipcio de productos de cerámica Lecico dijo que el mercado doméstico se reactivó el domingo tras una paralización total.

"Por la violencia que hubo, tuvimos cuatro o cinco días en que la economía se cerró completamente tanto a nivel doméstico como para las exportaciones, y eso ha afectado a nuestro negocio", dijo el vicepresidente ejecutivo Taher Gargour.

"Aparte, las exportaciones en los últimos días fueron imposibles debido a que había muy poco transporte interno para llegar a los puertos y los puertos tenían muy poco funcionamiento", añadió.

Los cajeros automáticos en el centro de El Cairo tenían largas filas de clientes ansiosos por retirar el dinero antes del cierre de las entidades financieras tras un día hábil más corto de lo habitual.

(reporte adicional de Marwa Awad; escrito por Edmund Blair y Patrick Werr)
 
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