Afortunadamente la morosidad en España, pese a la brusca subida del Euribor sigue en niveles muy bajos ya que como es lógico, la hipoteca es lo último que se deja de pagar pero desgraciadamente hay casos en los que los ingresos no llegan para pagar todo lo que se debe y se producen los primeros impagos.
Si estás en esta situación estás en un problema pero no es un obstáculo insalvable y puede tirar de la “compasión” del banco. Sí, eso existe y se llama código de buenas prácticas, se trata de un conjunto de medidas que los bancos adheridos a él deben aplicar para reestructurar la deuda de los hipotecados con una situación económica vulnerable. Todos los bancos adheridos a este código (que son la inmensa mayoría) están obligados a aplicar sus medidas a las familias que cumplen los requisitos
Tanto el banco como tú compartís el interés en que la hipoteca se pague, por lo que es probable que puedas negociar con el banco para reestructurar la deuda o pausar el pago por un tiempo.
¿En qué consisten las medidas? Las más destacadas son las siguientes.
Reestructuración de la deuda
Esto es renegociar la cuota para que te reduzcan el pago mensual bien bajando el interés o bien subiendo el plazo (que es lo más normal) e incluso una carencia de capital durante cinco años. Tiene algunos condicionantes como que debe ser para la vivienda habitual o que la cuota sea de más de la mitad de los ingresos familiares.
Aplicar una carencia de capital.
Esto te permitirá pagar solo la parte de intereses de tu cuota a lo largo del periodo acordado ese pe. Eso sí, el capital que no abones se te cobrará en las mensualidades que pagues cuando acabe esta carencia.
Reducir el interés de la hipoteca durante un tiempo. De este modo, tus cuotas serán aún más bajas mientras se te aplique la carencia. Pasado ese período, volverás a tener el mismo interés que aparece en la escritura del préstamo.
Ampliar el plazo de devolución hasta los 40 años, a contar desde que contrataste la hipoteca.
Al devolver el dinero en más tiempo, el importe de las cuotas será más asequible, pero acabarás pagando más en intereses (se generarán durante un plazo más largo).
Quita
Perdonar parte de la deuda. Aunque parezca imposible el banco puede llegar a esta solución si queda poco y le termina resultando rentable.
Dación en pago
Un caso también extremo para las familias que consiste en entregara la casa al banco a cambio de perdonar la deuda. Aunque suene extraño hay casos en los que la vivienda ha bajado tanto que ni lo pagado en la hipoteca compensa la deuda pendiente.
Al banco le interesa tan poco como a ti que no pagues la hipoteca, el quiere tu dinero y tú el piso así que si estás realmente apurado es bastante probable que puedas negociar con ellos para que reestructuren la deuda o te pausen durante un tiempo el pago de las cuotas.