6 datos interesantes sobre tu hipoteca

por Carlos Lopez

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La hipoteca es probablemente el producto financiero que más condicione tu vida ya que te acompañará durante muchos años y se llevará gran parte de tu sueldo. Lamentablemente son muchas las personas que la firman y se olvidan de ella, asumen que es una condena que hay que pagar mensualmente sin rechistar. Veamos 6 datos que pueden animarte a renegociar.

La hipoteca dura lo que tu quieras (o puedas)

Se trata de un contrato completamente renegociable y si logras ahorrar o tienes un ingreso extra puedes amortizar en plazo (reducir la duración total de la hipoteca) como en cuota (reducir lo que pagas cada mes). ¿Qué es mejor? Depende de cada uno, pero aquí te damos unas pistas.

Puedes (y debes) ser infiel a tu banco

Aunque últimamente las hipotecas duran más que los matrimonios no tiene por qué ser así y puedes ser infiel a tu banco. Basta con echar un vistazo a las ofertas de otras entidades financieras, hacer números y si te sale rentable cambiarte. No está exento de comisiones pero en cifras totales puede salir muy rentable sobre todo si tu hipoteca actual no es muy buena.

Puedes pasar tu hipoteca variable a fija y tu hipoteca fija a variable

Muy relacionado con los dos puntos anteriores puedes cambiar el tipo de hipoteca dentro de tu banco (novación) o a otro banco (subrogación) y entre esos cambios está la posibilidad de pasar tu hipoteca fija a una variable o viceversa.

El banco podría estar debiéndote dinero

Si tienes una hipoteca variable con un diferencial menor al 0.45% tu banco debería pagarte los intereses y si no lo hace es porque no quiere. Es poco dinero, pero es tuyo y deberías reclamarlo, es muy sencillo.

Tenemos la hipoteca más barata de la historia 

Según los datos del Banco de España, tenemos las hipotecas más bajas de la historia ya que el tipo medio se situó en agosto en un mínimo del 1,45%

Tu casa no es tuya aunque la hayas pagado entera

Es solo una formalidad porque tu casa realmente es tuya pero en el registro sigue hipotecada y tienes que hacer una escritura de cancelación en el banco porque si no, tendrás problemas cuando quieras venderla o hipotecarla de nuevo.

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