En Bélgica los trabajadores sanitarios le han dado, literalmente, la espalda a la líder del país.
El personal del Hospital Saint-Pierre en Bruselas coreografió una muestra unida de inconformidad durante la visita oficial de la primera ministra belga, Sophie Wilmès, el fin de semana.
Médicos y enfermeras se colocaron a ambos lados de la carretera que conduce a la entrada principal del hospital. Cuando el coche de la primera ministra llegó, uno por uno los trabajadores de la salud le dieron la espalda a la líder nacional.
La protesta se organizó en respuesta al descontento por la gestión de la pandemia de coronavirus, que ha sido muy criticada debido a la alta tasa de mortalidad del país
Según las cifras oficiales, Bélgica ha sido el país más afectado del mundo, por número de habitantes.
El país de solo 11,5 millones de personas ha tenido una tasa de mortalidad de 78,8 muertes por cada 100 000 habitantes, según los datos recopilados por la Universidad Johns Hopkins.
Cuando el Gobierno le da espalda a los ciudadanos, los ciudadanos le dan la espalda a los malos gobernantes. En Bélgica, los trabajadores de la salud recibieron así a la Primera Ministra, Sophie Wilmès, como protesta. pic.twitter.com/5N0igDMzx4
— Mónica Velásquez (@MoniVelasquezV) May 17, 2020