La bella y aparentemente frágil Amber Heard podría tener los días contados dentro del Universo DC a raíz de la batalla legal que está teniendo contra su ex pareja Johnny Depp por supuestos maltratos.
Las últimas acusaciones en el caso de Heard y Depp apuntan a que la actriz fingió diferentes golpes y contusiones, como emular un sangrado de nariz con esmalte rojo de uñas, tal y como ha explicado un amigo de su ex pareja.
Si se llegase a demostrar que éstas lesiones eran falsas, Heard podría ir a la cárcel y ser automáticamente despedida de la producción.
Su personaje tuvo mucho éxito en la primera entrega de Aquaman gracias a su química con Jason Momoa, y el estudio quiere repetir la fórmula ganadora, siempre y cuando los problemas legales no vayan a más.