Una vez le preguntaron a John Lennon si Ringo Starr era el mejor batería del mundo y su respuesta fué (bromeando) “No es ni el mejor batería de los Beatles”, para continuar diciendo que era un buen batería, con mucha técnica pero bastante menospreciado. Lo que no cabe la menor duda es de que Ringo Starr es un tipo con suerte, supo estar en el lugar adecuado en el momento adecuado y lo más importante, no dejó escapar la oportunidad.
¿Cuántos Ringo Starrs conoces?. Piensa en tu jefe o en el jefe de tu jefe ¿tiene más inteligencia que tú? ¿más talento? ¿o es cuestión de suerte y no desaprovechar una oportunidad?. ¿Y los ultrarricos?. Generalmente responden lo mismo, el trabajo.
Si la riqueza fuera el resultado inevitable del trabajo duro e iniciativa, todas las mujeres africanas serían millonarias. Las reivindicaciones que el 1% de ultraricos se atribuyen, que tienen inteligencia, creatividad o instinto únicos, son ejemplos de la falacia de la autoatribución. Esto significa atribuirse resultados de los que uno no es responsable. Muchos de los que son ricos hoy en día lo consiguieron porque fueron capaces de conseguir ciertos trabajos. Este logro se debe menos al talento e inteligencia que a la combinación del trabajo de otros y de estar en el lugar adecuado en el momento adecuado.