Hace no mucho, comentamos por aquí que cuando el sistema monetario se va al garete enseguida buscamos sustitutos ya que de alguna manera a todos nos interesa seguir comerciando pese a que los sistema oficiales no nos sirvan para ello. Un buen ejemplo fue el del tabaco en la Alemania de postguerra o los caramelos en Argentina.
Pero como aquí somos muy chulos y todos nos hemos forrado, propongo un nuevo sistema moneratio: Los Jaguars (el coche, claro). Este es al menos, el escenario que nos muestran en este interesante artículo que os traduzco libremente a continuación.
Imaginemos que el gobierno decide que la salud económica de la nación depende de la producción de automóviles Jaguar y de su distribución a la mayor cantidad posible de personas.
Para facilitar ese objetivo, empiezan a funcionar plantas de Jaguar en todo el país, cuya producción está subvencionada con el dinero de los impuestos. Para alegría de todos, estos coches se ofrecen a la venta al 50% menos de su precio anterior. La gente acude a los concesionarios y los compra.