El otro día leí con asombro que el 23% de los británicos piensa que Winston Churchill no existió y lo que es peor, el 58% cree que Sherlock Holmes si lo hizo (la de la foto es Katie Holmes, he comprobado que genera más visitas que su tío lejano Sherlock). Es una lástima ya que Churchill es un tipo de lo más interesante ya que además de ser primer ministro del Reino Unido en una época tan crítica como la segunda guerra mundial además fué premio Nobel de literatura. Un tipo realmente inteligente que nos deleitó con citas como las siguientes:
- El problema de nuestra época consiste en que sus hombres no quieren ser útiles sino importantes.
- A menudo me he tenido que comer mis palabras y he descubierto que eran una dieta equilibrada.
Y de vez en cuando le salía su vena política, de la cual deberían de aprender muchos de los que me estoy acordando ahora:
- El político debe ser capaz de predecir lo que va a pasar mañana, el mes próximo y el año que viene; y de explicar después por qué fue que no ocurrió lo que el predijo.
- La democracia es la necesidad de doblegarse de vez en cuando a las opiniones de los demás.
- La democracia es el peor sistema de gobierno diseñado por el hombre. Con excepción de todos los demás.
Y finalmente, una de la que si han aprendido nuestros políticos (todos)
- Sólo me fío de las estadísticas que he manipulado.
Vamos, igual que con el IPC.
Ya véis, al final en la mente de los ingleses permanecerá Sherlock Holmes y su “Elemental querido Watson” en vez de las geniales frases de Churchil que quedarán como las de un personaje de comic. Es lo triste de la manipulación informativa a la que estamos sometidos por todos lados que en vez de informar logran justo lo contrario y nos desinforman terriblemente. Si nos repiten constantemente que algo no existe, al final nos lo acabamos creyendo.
En la materia económica estamos igual ya que la información forma una parte más de la política económica, ayer ya comentamos la importancia del estado de ánimo de los consumidores para que la economía vaya bien o mal, así que la pregunta que nos hacemos es la siguiente. Suponiendo que un país esntra en crisis ¿que conviene? ¿reconocer la crisis y tomar las medidas adecuadas o dar mensajes de tranquilidad para que los ciudadano no se preocupen y sigan consumiendo? Como véis son dos estrategias completamente distintas y que sobre el papel ambas son perfectamente válidas.
En este entorno siempre nos queda la vía de escape que es Internet para leer publicaciones de todo tipo e ideología que nos orienten sobre la realidad económica. Así que pasemos a hacer un resumen de prensa:
- La noticia más importante: Hoy se reune el BCE. Probablemente no toque tipos, pero todos estaremos atentos con la máquina Enigma en nuestras manos para descifrar el mensaje de Trichet.
- Santander impulsa un 19,3% su beneficio (9.060 millones) y aumenta 25% el dividendo. La tasa de morosidad alcanzó el 0,95%, un total de 0,13 puntos más que un año atrás.
- En esta época lo que se premia en los bancos no son sus beneficios si no su exposición a las famosas hipotecas basura. Este es el caso de Deutsche Bank que gana un 48% menos pero no tiene ninguna exposición subprime con lo cual los mercados la premian con una subida en bolsa de más del 2% (Me corrigen diciéndome en la zona de comentarios, que el riesgo se lo encasqueta a DB Credit).
- La bolsa americana se gira a la baja por su temor a la inflación.
- Y mientras tanto, para reanimar el sector de la contrucción tenemos a Zapatero que agilizará la obra pública para dinamizar el sector inmobiliario
Así que como es posible que nos toque apretarnos el cinturón en un futuro, que mejor que el último invento de Tau, un azulejo que ayuda a realizar dietas o a controlar el tiempo del café de los trabajadores. Ya sabéis, nada de picar entre horas y a currar, que sois unos vagos.
Actualizo con dos noticias:
- La compraventa de pisos cayó en Madrid y Cataluña un 46% y un 31,8% el 2º trimestre
- El Banco Central de Inglaterra baja los tipos 0.25 puntos (lo esperado por el mercado)
- El BCE mantiene el precio del dinero en el 4%