BOLSA DE VALORES – de CUBA

Johngo

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Cuba tuvo una vez un mercado de valores, el de La Bolsa de Valores de la Habana, que duró desde 1920 hasta 1959, cuando la revolución cubana (Comunista) terminó con la propiedad privada en el país. El intercambio de la Habana era, de hecho, una de las mayores bolsas de valores de América Latina.

La creación de una bolsa de valores cubana podría suceder en los próximos tres a cinco años, dijo Tom Herzfeld, presidente y presidente de la sede en Miami, Thomas J. Herzfeld Advisors, una firma de un fondo cerrado que se ha especializado en la inversión de valores del Caribe desde la década de 1990 –y que corre el Fondo de la Cuenca del Caribe (CUBA), que fue lanzado en 1993. Este fondo fue diseñado para invertir independientemente del embargo a Cuba y con un enfoque en las empresas que hacen negocios en la región, incluyendo el operador de cruceros Carnival, con sede en Panamá compañía Copa Holdings , y la compañía de materiales de construcción con sede en Alabama Birmingham, Vulcan Materials.

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Por el momento, la forma más directa de los inversores en acciones para conseguir un pedazo de la historia de Cuba emergente es comprar empresas enumeradas que tienen, o el plan de formación de empresas conjuntas, dentro del país.

Una de las empresas, aunque negocia más públicamente, que muestra el modelo es BioSciences YM. En 1994, el desarrollador canadiense de drogas, ha sido incluido en la Bolsa de Valores de Toronto y en la Bolsa de Nueva York, formó una empresa conjunta con el Centro de Inmunología Molecular de Cuba (CCIMAB), llamados BioSciences CIMYM. El riesgo fue del 80 por ciento de propiedad de YM BioSciences y el 20 por ciento propiedad del gobierno cubano y pasó a desarrollar el nimotuzumab medicamento contra el cáncer. Esta empresa no dio lugar a una droga blockbuster. En diciembre de 2012, YM vendió sus activos relacionados con esa droga a InnoKeys TEP, una empresa de servicios de salud con sede en Singapur. En febrero de 2013, YM fue adquirida por el gigante de la biotecnología Gilead Sciences , que se ha centrado en otras drogas con potencial. Pero la biotecnología sigue siendo una de las historias económicas con mayor potencial dentro de Cuba.

Abivax, una compañía de biotecnología que invierte en el desarrollo de vacunas y medicamentos antivirales y es propiedad en gran parte por Truffle Capital, una firma de capital riesgo con sede en París, comenzó a negociar con Cuba en el año 2010. Actualmente está desarrollando, con su socio el Centro Cubano de Ingeniería genética y Biotecnología (CGIB), una vacuna para el tratamiento de hepatitis crónica B. El CEO Dr. Hartmut Ehrlich de dicho sector de la biotecnología y de la salud de Cuba tiene un gran potencial debido a su historia de tener que auto-desarrollo-fondos de los medicamentos modernos. "Ahora están en la posición para mirar en las asociaciones a través de compañías como Abivax u otros o por sí mismos para exportar estos productos en cada vez más países en el extranjero", dijo. "Creo que esto se convertirá en un área que será de interés para los inversores minoristas desde el punto de vista del crecimiento potencial."

Herzfeld dijo que la industria de la biotecnología cubana ha producido una notable variedad de productos, desde las vacunas avanzados a los productos farmacéuticos y productos de diagnóstico. "El conjunto actual de los fármacos en desarrollo es robusto", dijo, y agregó, "Una vez que se corra la voz, una gran cantidad de inversores interesados tomará nota".
 
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