10 leyendas urbanas sobre el ahorro energético

efe

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Hay ciertos hábitos que hemos adquirido para ahorrar energía, que o bien no tienen buena base científica o bien están directamente equivocados.

Veamos 10 "leyendas urbanas" sobre el ahorro energético

  1. Dejar nuestros aparatos eléctricos en modo espera o standby apenas consume energía. Esta es una primera idea que hay que desterrar, aunque lo cierto es que cada vez más gente se va concienciando sobre este punto y opta por apagar por completo sus aparatos. Ten en cuenta que el standby representa cerca del 5% del consumo de nuestros hogares y olvidarnos de su uso puede suponernos un ahorro de hasta 100 euros anuales.
  2. Es mejor mantener una temperatura ambiente que apagar la calefacción. Segunda premisa a olvidar y esta sí que ha calado hondo en el imaginario de los hogares. El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía recomienda ajustar el encendido de la calefacción al horario real de ocupación de las viviendas y apagarla por la noche. Es más eficiente que dejarla encendida toda la noche.
  3. Mantener los fluorescentes encendidos gasta menos que si se encienden y apagan cada vez. Otra idea falsa. Lo que sí puede ocurrir es que la vida del fluorescente pueda acortarse si se enciende repetidas veces. Si tenemos claro esto y además utilizamos bombillas de bajo consumo conseguiremos un ahorro energético mayor.
  4. La cocina de gas gasta más que las vitrocerámicas actuales. Falso, serán más cómodas pero consumen cuatro veces más que las de gas.
  5. Es mejor lavar los platos a mano que en el lavavajillas. A pesar de ser más incomodo, mucha gente opta por lavar a mano en lugar de poner el lavavajilla, basándose en esta premisa falsa. En concreto, el lavado a mano puede suponer unos 119 litros de agua frente a los 15 litros por lavado de un lavavajillas eficiente para la misma cantidad de vajilla. Así que ahórrate esfuerzos innecesarios.
  6. En verano consumimos menos energía. Esto es falso y mucho más en los últimos años en los que el uso de aparatos de aire se ha disparado.
  7. El cambio de hora supone un ahorro de energía. Mover las agujas del reloj dos veces al año no implica necesariamente un ahorro de energía. Al atrasar nuestro reloj una hora, la oscuridad llega una hora antes de lo habitual y dado que nuestra jornada laboral se mantiene invariable será por la tarde al llegar a casa cuándo consumiremos esa hora de luz que nos hemos ahorrado por la mañana.
  8. Es más cara la electricidad que el gas. Este mito es relativo pues el ahorro no viene dado del uso de una energía u otra. Lo determinante es el tipo de vivienda y el lugar en el que ubique.
  9. El gasto energético no depende del tipo de electrodoméstico que tengamos. Otra idea que debemos olvidar. Es importante poner atención en la compra de nuestros aparatos. Un electrodoméstico de la clase G puede consumir tres veces más que uno de clase A. Esto lo podrás comprobar en la etiqueta de eficiencia que los electrodomésticos deben llevar.
  10. Dejar el ventilador encendido en una habitación cerrada enfría el ambiente. Falso también. El ventilador lo único que hace es mover el aire de la estancia pero nunca enfriar o regular la temperatura.

 
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Más consejos:

Agua: consejos que no hay que dejar correr
Derrochar agua se puede evitar reduciendo el caudal con la instalación de perlizadores en grifos y duchas. También se consigue reducir el tiempo en que se abre el grifo mediante detectores de manos y pulsadores. Opta por la ducha, consume cuatro veces menos agua y energía que un baño. Además, siempre se debe situar el termo en el interior de la vivienda y en posición vertical para aprovechar mejor su capacidad.

Luces para la factura eléctrica
Para que al recibir la factura de la luz o el gas no nos entre un calor insoportable, también conviene seguir una serie de consejos simples. Cambiar las lámparas incandescentes por fluorescentes de bajo consumo, que duran diez veces más, ahorra un 80% de energía. También es conveniente, por ejemplo, instalar un termostato programable para encender la calefacción sólo las horas en que sea necesaria. Para conservar el calor, hay que bajar las persianas en cuanto anochezca y poner alfombras en las habitaciones principales. Además, instalando protectores solares en las ventanas, tu factura de refrigeración puede reducirse hasta un 30 por ciento. Si sustituyes la caldera de carbón o gasóleo por una de gas natural contaminarás menos y tu factura se reducirá otro 30 por ciento.

Electrodomésticos y los gestos cotidianos
Sustituir tu frigorífico, lavavajillas y lavadora por electrodomésticos de la clase A++ supone un ahorro de energia y del gasto en torno a un 30%. Siempre se debe ubicar el frigorífico en un lugar donde tenga ventilación trasera, dejando evacuar el calor. En la lavadora y lavavajillas hay que utilizar programas de baja temperatura. Si usas sartenes y ollas con un diámetro superior a la placa y además las tapas conseguirás que la cocción sea más rápida y lograrás un ahorro de hasta un 50 por ciento de energía.

Transporte, ahorro pasito a pasito
No hace falta explicar demasiado que la bicicleta, el tren o el trasporte público son medios más limpios y baratos para ir a trabajar que el coche. Si finalmente nos decidimos por el vehículo propio, se recomienda arrancar el motor siempre sin pisar el acelerador y, además, apagarlo en paradas que vayan más alla del minutos.

Empresas eficientes
En un contexto difícil, el uso eficiente de la energía puede marcar la tenue línea roja que separa el éxito y el fracaso de un negocio. Unas cuantas medidas pueden contribuir a reducir notablemente costes en la empresa. Por ejemplo, instalar detectores de presencia que activan la luz al paso de una persona en pasillos o zonas de paso. En la misma línea, es recomendable instalar sensores de luz natural. Cuando la luz solar no alcanza un mínimo, la célula ordena encender las lámparas. Y, por supuesto, se deben desterrar las lámparas y apostar por la tecnología Led.

La factura energética menguará también con un sistema de climatización por zonas, que permite obtener la temperatura que desee en cada zona, lo que se traduce en notables ahorros. Otro truco sencillo y eficaz es cubrir los aparatos de aire acondicionado con una pérgola que les de sombra.

No hay que olvidar tampoco que los portátiles consumen la mitad de energía que los ordenadores de sobremesa. Y que las pantallas de LCD también gastan menos que las convencionales. Indispensable resulta la instalación de regletas anti «stand by», para que los equipos que no estén siendo utilizados no consuman nada de energía. Y siempre hay que apagar por completo l0s equipos al salir de la oficina.
 
E

Enefi

Guest
Discrepo con el 7

En términos generales me parece un artículo muy recomendable, pero hay que matizar el punto 7, es cierto que no ahorras energía como consumidor, pero solo con ver la gráfica del consumo diario de Red eléctrica se ven los beneficios que tiene el cambio horario para el sistema eléctrico en general y es que al desplazar los picos de consumo una hora varía drásticamente los picos de demanda, si los picos son menores las centrales mas ineficientes no entran en el mix y por lo tanto se abarata el consumo de todos, por lo tanto no deja de ser un buen consejo y no deja de ahorrar € a pesar de no ahorrar Kw/h.
Puedes hacer tu mismo la consulta en la web de REE
 
N

No Registrado

Guest
Ojo con este último comentario: tu mismo lo dices, no se ahorran kW, por lo que cada uno de nosotros vamos a pagar lo mismo. En cambio si que hay un ahorro puesto que la generación más ineficiente (que es la última en entregar potencia a la red eléctrica), no entra en marcha.
Atención! pregunta: si hay ahorro y no es en el bolsillo del españolito de a pié, ¿quién se está beneficiando de este ahorro?
Que cada uno saque sus propias conclusiones
Saludos,
 

EmilioM

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Es cierto que dejando los aparatos eléctricos consumen bastante electricidad.
Puede que por dejar solamente la televisión con el pilotito rojo no pase nada, pero con la gran cantidad de electrodomésticos que tenemos en casa.... puede llegar a elevar bastante el consumo.
Gracias por compartir los consejos!
 

EmilioM

New Member
En términos generales me parece un artículo muy recomendable, pero hay que matizar el punto 7, es cierto que no ahorras energía como consumidor, pero solo con ver la gráfica del consumo diario de Red eléctrica se ven los beneficios que tiene el cambio horario para el sistema eléctrico en general y es que al desplazar los picos de consumo una hora varía drásticamente los picos de demanda, si los picos son menores las centrales mas ineficientes no entran en el mix y por lo tanto se abarata el consumo de todos, por lo tanto no deja de ser un buen consejo y no deja de ahorrar € a pesar de no ahorrar Kw/h.
Puedes hacer tu mismo la consulta en la web de REE
Totalmente de acuerdo
 
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